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TRABAJADORES PUBLICOS DEL PS MINISTERIO DE EDUCACION

PUBLICACION DE ARTICULOS

Resoluciones del Comité Central del Partido Socialista

 

05 de noviembre de 2011
 
  
1.- Hoy es el tiempo de la unidad del conjunto de las fuerzas democráticas comprometidas con la construcción de un Chile más justo y democrático. Como acordamos en nuestro último Congreso Ordinario, el desafío consiste en crear un gran frente opositor, desde la Concertación, basado en un acuerdo político y programático.
 
El Partido Socialista valora el acuerdo suscrito por los partidos de la Concertación el pasado 05 de octubre en que expresan su “voluntad de concurrir a la conformación de una nueva mayoría para cambiar Chile”, a través de “un diálogo sin vetos y una agenda sin exclusiones” con todos los actores sociales y políticos de la oposición.
 
2.- Para hacer realidad los cambios que Chile necesita, la constitución de esta nueva mayoría social y política nos exige mayores grados de unidad.
  
En este sentido, el Partido Socialista reafirma su compromiso para generar un acuerdo amplio en torno a un candidato único a alcalde o alcaldesa en representación del conjunto de la oposición en todas las comunas de Chile.
 
Los socialistas valoramos también el acuerdo suscrito por los partidos de la Concertación para que la definición de los candidatos a alcaldes o alcaldesas de nuestra coalición se realice mediante primarias abiertas y vinculantes en abril del próximo año, y esperamos que las demás fuerzas de la oposición participen en este proceso, en especial aquellas que han propiciado insistentemente este mecanismo.
 
3.- Los socialistas reiteramos nuestro llamado a la unidad. Por ello, insistimos en la constitución de una lista unitaria de la Concertación a nivel de concejales y concejalas para la próxima elección municipal. En este marco, respetamos pero no compartimos la decisión de algunos sectores de nuestro conglomerado de no participar en esta lista unitaria.
 
4.- Para reinaugurar un horizonte de transformaciones para construir un Chile más justo y democrático, reforzaremos el entendimiento entre el centro y la izquierda. Esto se traduce en un acuerdo con el Partido Demócrata Cristiano para el período político que incluye la elección presidencial, parlamentaria y municipal.
 
5.-Se mandata a la Mesa Directiva del Partido para que en este contexto constituya una lista de concejales y concejalas con el Partido Demócrata Cristiano y los demás actores sociales, partidos políticos e independientes de la oposición, que decidan participar en este esfuerzo unitario. Este entendimiento deberá reflejarse en todas las etapas del proceso electoral.
 
6.- El Partido Socialista invita a sus militantes y a todos los independientes que comparten nuestros valores y principios a participar en las elecciones primarias, abiertas y vinculantes para elegir a nuestros candidatos a alcaldes y alcaldesas, que se realizarán el próximo 11 de diciembre.
 
7.- Se mandata a la Comisión Política para que establezca el itinerario de primarias para la definición de los candidatos a concejales y concejalas del Partido Socialista.
 
8.- Sin ánimo de agotar el diálogo programático que se inicia, los socialistas, desde la Concertación, promoveremos una nueva mayoría social y política que debe constituirse en torno a un proyecto de transformaciones que impulse:
 
i) Una nueva Constitución para Chile.
 
ii) Un nuevo pacto social para terminar con las desigualdades sociales, de género, étnicas, territoriales, y de todo tipo, así como los abusos en la sociedad chilena.
 
iii) Un nuevo modelo de desarrollo para todos que promueva la integración y la cohesión social, con un Estado garante y proveedor de bienes públicos de calidad y amplia cobertura.
 
iv) La descentralización político-administrativa del país, fortaleciendo la Democracia en el territorio, tanto a nivel regional como local.
 
v) Una reforma tributaria que garantice una educación pública, gratuita y de calidad en todos los niveles, y que potencie el sistema público de salud.
 
vi) Un nuevo Código del Trabajo y un nuevo estatuto administrativo que, resguardando y ampliando los derechos de los trabajadores, enfatice el diálogo social y una auténtica negociación colectiva.
 
  

VOTO POLÍTICO EDUCACIÓN
VI PLENO COMITÉ CENTRAL
 
 
A)    Creemos que la educación es un derecho humano básico. Para ser titular de ese derecho, la única condición necesaria y suficiente es la “ser humano”, no importando la raza, el color, la religión, la ideología, ni menos la condición social. El estado debe entregar educación pública (pre-escolar, básica, media, técnico profesional y universitaria) sin  ningún tipo de discriminación y sin  un “precio” asignado por el mercado.
 
B)    Desde el inicio de la movilización estudiantil, el gobierno de Piñera ha desconocido las exigencias de avanzar hacia una educación de calidad, reforzar el papel de la educación pública y aumentar efectivamente los recursos destinados a este efecto en el presupuesto.
 
El actual gobierno está empeñado en debilitar las demandas que las organizaciones de los estudiantes han hecho en forma responsable, desconociendo que ellas están respaldadas por el 80% de nuestros compatriotas. Su actitud niega toda posibilidad de un acuerdo que nosotros quisiéramos lograr, a condición de que se planteen y resuelvan los asuntos de fondo, en lugar de limitarse a un juego  mediático para mantener su visión de la educación como un bien de consumo, fundada en el lucro y la lógica del mercado.
 
La mayor dificultad que una reforma del sistema educativo enfrenta, es que la derecha sigue fundando su concepción de la educación en las reformas efectuadas en la dictadura de Pinochet; Establecer un Estado mínimo, con escasos recursos y privilegiar una privatización gradual de la educación. Para ellos lo deseable es que quede en manos de los grupos empresariales y les parece deseable que la Educación Pública se reduzca hasta desaparecer.
No existe, en la Ley de Presupuesto que hoy se discute en el Parlamento, propuesta alguna, que permita un entendimiento en este tema tan vital para nuestro futuro.
 
El Partido Socialista expresa su preocupación ante el país por la irresponsabilidad de esta conducta que sólo va a originar nuevos conflictos a corto plazo para materializar los cambios que el país ya decidió realizar.
 
Por lo anteriormente expuesto, el Comité Central declara:
 
1.     Somos partidarios de una gran reforma estructural en la educación que genere un sistema de educación pública gratuita para todos. La educación debe ser un derecho.
2.     Exigimos que se ofrezca una salida a los 50 mil estudiantes  que el Ministerio de Educación ha condenado a repetir de curso.
3.     Creemos que esto debe ser financiado con una gran Reforma Tributaria enfocada en las grandes fortunas. Es justo que aquellos que obtienen millonarias ganancias, retribuyan un poco de ello a Chile.
4.     Trabajaremos para que esto esté incluido como punto  central del
Programa de Gobierno para las elecciones presidenciales del 2013. Un proyecto de esta envergadura debe unir y convocar a todas las fuerzas políticas y sociales.
 
 
Santiago de Chile.  Noviembre 5 de 2011
  

 

COMUNICADO: NUEVA DIRECTIVA ANDIME

Brigada de los Trabajadores Socialistas Mineduc 

Santiago, 31 de julio de 2008

Estimadas compañeras y estimados compañeros

Como Uds. se habrán enterado, acaba de asumir la nueva directiva de ANDIME. Ésta ha quedado compuesta de la siguiente manera: NELSON VIVEROS LAGOS (PS) Presidente; EGIDIO BARRERA GALDAMES (PPD) Secretario;  MARIO ULLOA MARTÍNEZ (PS) Tesorero; ROSALÍA ELGUEDA VILLALOBOS (PS) Pro Tesorera;  ELSY MORENO MEIER (PDC) Directora; MIGUEL VERDUGO OSORIO (PDC) Director y MANUEL ALVAREZ FLORES (PDC) Director.

Sin duda, el resultado de la elección de nuestra organización gremial, representa un gran triunfo para nosotros los socialistas del Ministerio de Educación, no sólo porque nuestros compañeros obtuvieron las más altas votaciones tanto individual y como partido, sino también porque volvemos a tener tres miembros de nuestro organización política en la directiva nacional de ANDIME.

Este triunfo se debe, por un lado, a la calidad, compromiso y entrega mostrados por nuestros candidatos y nuestra candidata y, por otro, porque pudimos articular acciones de compañeros y compañeras socialistas de todo el país. Ha sido una tarea titánica que ha rendido sus frutos y que nos demuestra que en la medida que podamos crecer en organización y compromiso, podremos acometer grandes proyectos con la convicción de que saldremos airosos en su consecución.

En el proceso de constitución de la directiva, por intermedio del compañero Presidente y el Secretario General de nuestra Brigada, establecimos diálogos con los compañeros del PPD y de la Democracia Cristiana,  proceso no exento de algunas dificultades, como lo sintetizamos a continuación.

Teniendo siempre claro que no podría repetirse la desagradable situación que ocurrió hace dos años, el que afectó enormemente el buen desempeño y cohesión de nuestro gremio, desde un principio, nuestra posición como partido y en acuerdo con nuestros candidatos fue que ante cualquier eventualidad en cuanto a los resultados electorales, nosotros, los socialistas debíamos ser consecuentes y postulamos que en la definición de los cargos de la directiva nacional se respetará el principio de prelación que ha sido establecido por las bases de ANDIME y forma parte de nuestra tradición gremial; es decir que el candidato/a que obtuviera la más alta mayoría debía elegir el cargo que estimara conveniente y así sucesivamente hasta llegar a la opción de los directores.

La aplicación del principio de prelación fue el criterio central que sostuvimos en las conversaciones que con nuestros aliados de la Concertación. Desde esta perspectiva, a nuestro compañero Nelson Viveros le correspondía legítimamente, ser el Presidente de ANDIME. Sin embargo, ambos colectividades aliadas concertacionistas no estuvieron de acuerdo con la aplicación estricta del principio de prelación. El PPD, aduciendo que había un resultado muy estrecho entre el primer y el segundo candidato, Nelson Viveros y Egidio Barrera, respectivamente y que habría un “empate técnico” entre ambos, proponía que compartieran la presidencia un año cada uno, no respetando el principio y sin siquiera considerar que los candidatos/a socialistas tenían la más alta votación como colectivo. Por otro lado, nuestros aliados del  PDC, si bien reconocieron nuestro legítimo derecho a liderar a ANDIME, no estaban de acuerdo con el principio de prelación, ya que proponían elegir como presidente a un compañero socialista que no era el que obtuvo la más alta mayoría.

Nosotros como socialistas, en todo momento sostuvimos el argumento de base que lo más importante era los intereses y los objetivos del gremio; que su unidad es y será lo fundamental, sobre todo considerando que se están produciendo situaciones en el ámbito educativo nacional sobre el cual los funcionarios del Mineduc tenemos mucho que decir, sin mencionar siquiera, lo que implican las propuestas y proyectos que reorganizan el sistema nacional de educación, que llevarán a una reducción del ministerio, el traslado de funcionarios a otras reparticiones y, seguramente, como ocurre en estos casos, a la supresión de algunos cargos de acuerdo a lo que se propone. Es por esto que nuestra posición en estas conversaciones fue siempre buscar una mesa directiva nacional de unidad. En el caso de las conversaciones con el PPD, respetar la nominación de Secretario del compañero Barrera; y con el PDC que hubiera una mesa de integración, incluso renunciando al derecho que tenía un compañero nuestro por orden de prelación.

En fin, los resultados ya son conocidos. Finalmente se impuso el principio de prelación y del criterio de ser la colectividad con mayor votación del gremio. En el momento de la constitución de la directiva nacional, el compañero dirigente del PPD concurrió con su voto a la elección de nuestro compañero Viveros como Presidente y quedó la mesa como actualmente está constituida. En un último intento, conversamos con el PDC para que la compañera de su colectividad que tenía la más alta votación fuera elegida como Tesorera, pero esto fue rechazado, quedando ellos como directores. Sin duda es lamentable lo ocurrido, ya que más allá de la distribución de los cargos, hay una gran organización que liderar y socias y socios y dirigentes intermedios que esperan una conducción unitaria, clara e inteligente ante los desafíos que se avecinan. Como socialistas no cejaremos en apoyar para que se produzca la unidad de energías y en la conducción y para esto, trabajaremos en todos los niveles que corresponda para engrandecer a ANDIME y para hacer respetar nuestros derechos e intereses como miembros de esta noble institución y como funcionarios del Ministerio de Educación.

 

DIRECCION NACIONAL

 

 

 

Declaración senador Navarro sobre educación

Senador Navarro, presidente de Comisión de Educación:

“No es compatible querer mejorar la educación pública y mantener el lucro” 
 

     Considerando que es “contradictorio e incompatible querer mantener el lucro y la selección en la educación y a la vez trazarse como objetivo el mejoramiento de la calidad de la educación pública” el senador Alejandro Navarro, presidente de la Comisión de Educación dijo que “sería bueno retomar la propuesta inicial del gobierno en el sentido de eliminar  el lucro y la selección, que era y es una propuesta que no sólo concita un apoyo mayoritario entre la ciudadanía, sino que además es positivamente evaluada por los expertos en la materia”. 

     El parlamentario reiteró que “además, luego de la destitución de Provoste a nosotros nos parece que hay un cambio evidente en el anterior escenario que posibilitó el acuerdo entre la derecha y el gobierno respecto de la educación, acuerdo que permitía la sobrevivencia forzada del lucro y de la selección. Creo que es bueno decir las cosas con franqueza, más importante que sacar adelante un acuerdo con forceps, lo importante es discutir y revisar ese acuerdo, de manera de legislar pensando en los estudiantes y su futuro, sus padres, en los profesores, y no sólo en los sostenedores o dueños de colegios”. 

     “Además -agregó- creemos que aún estamos a tiempo de revisar los alcances de ese acuerdo. Y la mejor manera de que cualquier acuerdo se convierta en una buena iniciativa es considerando la opinión mayoritaria de los actores del sistema. Ciertamente se hizo un importante esfuerzo en ese sentido en el Consejo Asesor, al que incluso se criticó por ser tan diverso. Pero los contenidos del famoso acuerdo con la derecha, más allá del símbolo de las manos levantadas, no representa toda la diversidad técnica, política y social de ese Consejo y menos de sus propuestas”. 

     Navarro dijo que “sigue haciendo falta abrir el tema de la educación a la ciudadanía, para que efectivamente tengamos una educación que sea -como se dice siempre- un tema país. Justamente una de las diferencias entre los procesos de reformas exitosos que se han desarrollado en distintos países en materia educacional y el que llevamos adelante en Chile, es que en esos países la comunidad es parte activa del proceso. Yo todavía aspiro a una verdadera revolución educacional, que al final elimine la lógica del lucro y la selección”. 

      El legislador dijo que “ahora pareciera que todo el debate sobre educación girara en torno al acuerdo suscrito con la derecha, como si fuera intocable, cuando diferentes estudios de organismos nacionales e internacionales nos dicen que los temas de fondo tienen que ver con la discriminación que generan el lucro y la selección, en todo los niveles. La OCDE, que es un organismo en el que Chile espera ser admitido dijo en su informe sobre la educación chilena del 2004 que la educación chilena está influenciada por una ideología  que da una importancia indebida a los mecanismos de mercado para mejorar la enseñanza y el aprendizaje” 

      “Asimismo -añadió- existen otros estudios más recientes, como “Evolución de la segregación socioeconómica de los estudiantes chilenos y su relación con el financiamiento compartido”, desarrollado por profesionales de la Universidad de Chile a fines del año pasado, que con claridad señala que la segregación socioeconómica de los estudiantes en el sistema escolar chileno es elevada. Esta conclusión es aplicable a los estudiantes más vulnerables y a aquellos de mejores condiciones socioeconómicas, y ha sido verificada tanto en educación básica como media (...) esta alta segregación socioeconómica ha tenido una evolución creciente en los últimos años, característica presente en la mayor parte de las regiones y comunas del país”. 

      Navarro dijo que, “por lo demás este no es un problema que afecte sólo a la educación básica y media, sino que también, y por lo mismo, es un tema que afecta a la educación superior. De hecho existe un estudio elaborado por expertos de Psicología de la Universidad de Chile, de junio de 2007, titulado “Cuando la suerte está echada”, que concluye que es más eficiente educar bien en la educación básica que restituir en la media; que seleccionar a los estudiantes en la educación media es un incentivo muy efectivo para perpetuar la baja calidad de los establecimientos educacionales; que el intento infructuoso de ingresar a la universidad constituye una forma actualizada de fracaso escolar; y que la PSU actúa como un instrumento de legitimación de las desigualdades sociales, poniendo como dato ejemplificador que sólo el 0,9% de los estudiantes de menores ingresos que rinden la PSU obtiene más de 700 puntos”. 
 
 
 

PRENSA OFICINA PARLAMENTARIA

 

Concertación: El retorno de los salmones

autor Patricio Bustos Pizarro

domingo, 16 de diciembre de 2007

Todo partido político o coalición de partidos que olvide o se despreocupe de generar efectivamente procesos destinados a

la formación, promoción y proyección de nuevos liderazgos internos y/o a la cooptación de dirigencias emergentes en el

mundo social, experimentará su paulatino anquilosamiento, su creciente pérdida de sensibilidad y de influencia sobre

la ciudadanía; viéndose inevitablemente obligado a recurrir a antiguas y desgastadas dirigencias y liderazgos para

asumir nuevas tareas y desafíos.

Sin cuestionar las capacidades, las experiencias, las trayectorias, los liderazgos, los aportes y la credibilidad de algunas

de estas dirigencias, es del todo entendible para los estudiosos de los procesos políticos y societales que frente a

situaciones de conflictos o de ausencia de acuerdos y de conducciones consistentes, los partidos y/o las coaliciones

convoquen a sus líderes; particularmente a aquellos que en determinadas coyunturas realizaron un trabajo exitoso o

contribuyeron significativamente a resolver dificultades existentes.

Sin duda que el retorno de los antiguos liderazgos políticos es entendible y lógico para los estudiosos de las crisis políticas,

gubernamentales y particularmente de las sociedades en transformación, sin embargo la ciudadanía, dependiendo de las

realidades específicas de cada sociedad, tiende a percibir y a elucubrar otras cosas: ausencia de voluntad para

favorecer la renovación política, repetición de liderazgos y personalidades, mantención de cuotas de poder, oligarquización de

la política, perpetuación en los cargos públicos, construcción de redes de influencia y de acceso al poder, entre otros

ejemplos.

En términos generales, los procesos de retorno al poder de los liderazgos antiguos puede obedecer a tres cosas:

Primero, a que se requiere de la experiencia, de la credibilidad y de la capacidad de construir acuerdos políticos estables

para resolver positivamente los períodos de crisis y de incertidumbre. Segundo, a que los liderazgos antiguos de algún

modo tienden a constituirse en depositarios o simplemente encarnan los sueños y anhelos más genuinos de progreso,

de desarrollo, de justicia y de libertad existentes en los distintos sectores e intereses que se agrupan y que conviven en

una sociedad. Tercero, a que es preciso incorporar liderazgos políticos fuertes para generar procesos políticos inclusivos,

de unidad centrípetos y desarrollo de dinámicas de gestión que permitan recuperar la iniciativa política y reposicionar a

las elites en el poder, con el fin de mantenerlas en él.

De ahí entonces que no es correcto diabolizar a quienes pretenden mantenerse en el poder. No tiene nada de

condenable ni menos reprochable. Muy por el contrario, el célebre hombre público del renacimiento italiano, Nicolás

Maquiavelo, lo señalaba en su conocida obra “El Príncipe”. Sostenía que el príncipe (autoridad, liderazgo,

etc.) debía acceder al poder, acrecentarlo y mantenerse en él. Con tal máxima política se inauguraba lo que hoy

podemos denominar la filosofía política moderna. Efectivamente, han transcurrido prácticamente quinientos años y tal

planteamiento continúa vigente, sólo que la mantención de los liderazgos en el poder, ya sea en los partidos, en el

gobierno o en el parlamento, depende básicamente de la opinión y decisión de los militantes y de los electores, es decir,

de los ciudadanos que participan en el desarrollo de las instituciones y de las sociedades democráticas. En definitiva, la

verdadera alternancia en el poder depende exclusivamente de los ciudadanos y no de las elites políticas.

La insuficiente renovación en y de las elites políticas partidarias, parlamentarias y gubernamentales en Chile es más que

evidente y así lo demuestran algunos estudios realizados por importantes entidades académicas y centros de

investigación de la realidad político-social del país. En efecto, desde el golpe de estado de 1973 hasta la recuperación de la

democracia en marzo de 1990, hubo un mínimo de renovación y de cambios en los liderazgos políticos de las estructuras

partidarias y en las autoridades que luego asumieron responsabilidades públicas, tanto en el gobierno como en el

parlamento.

Desde el punto de vista de la politología, la escasa renovación de liderazgos en las elites políticas chilenas, entre 1973 y

1990, puede entenderse y hasta justificarse por el cúmulo de restricciones establecidas por la dictadura para desarrollar

la actividad política partidaria opositora, por el exilio obligatorio que afectó a numerosos liderazgos y por las condiciones

en las que la política de partido fueron vivenciadas en clandestinidad.

No obstante lo señalado, entre 1973 y 1990, sólo los sectores vinculados política, económica e ideológicamente a la

dictadura experimentaron procesos significativos de recambio y de renovación de sus elites políticas, de sus dirigencias y

de sus liderazgos internos. Un importante número de estos nuevos líderes de derecha comenzó a incorporarse a la

actividad pública en 1990 (parlamento) y en 1992 (municipios) y se ha prolongado, cada vez con menos fuerza, hasta la

última elección presidencial y parlamentaria del 2005.

Los partidos del sistema político chileno no han logrado impulsar procesos efectivos de renovación respecto de sus elites

partidarias, de sus dirigencias y de sus liderazgos internos. Quienes han planteado en algunos momentos la tesis de

“continuidad y cambio”, finalmente han desechado el cambio y han optado por la continuidad; cuestión que

El Clarín de Chile

http://www.elclarin.cl _PDF_POWERED _PDF_GENERATED 18 December, 2007, 07:33

les permite mantener sus cuotas de poder y sus influencias dentro del sistema.

En los últimos siete años han surgido varias iniciativas al interior de los partidos que han buscado generar procesos de

recambio de liderazgos en las conducciones partidarias y en el gobierno. Nuevos rostros, líderes, ideas, dinámicas de

conducción, de gestión y de procesos de construcción de acuerdos políticos aparecen como una justa y necesaria demanda

de parte de la ciudadanía. Incluso a nivel de cargos de representación popular (parlamentarios, alcaldes, concejales) es

conveniente fijar límites para las reelecciones.

Pese a los esfuerzos realizados por algunos sectores, tanto de gobierno como de oposición, más ha podido la

institucionalidad heredada de la dictadura (Constitución política, sistema electoral binomenal, votación obligatoria, etc.) que

la aspiración que busca revitalizar y profundizar la democracia. Es sabido que la actual institucionalidad del país ahoga la

democracia y restringe la efectiva participación de la ciudadanía. En consecuencia, se trata de airear el sistema político o

dejarlo fenecer por senectud, anquilosamiento progresivo o simple desafectación ciudadana.

Es paradojal, pero todo parece indicar que el actual cuadro que presenta la institucionalidad política del país resulta

propicio para los partidos de la Concertación; y por cierto también para los de oposición. Existe un universo electoral

cautivo, que más allá de las abstenciones, los nulos y los blancos, tiende a elegir con cierta regularidad a los mismos

de siempre. De ahí entonces que nadie quiere cambiar el traje con el que se siente cómodo.

Por estos días se ha hecho más tangible la ausencia de nuevos liderazgos y dirigencias en la elite política nacional. El

retorno de Francisco Vidal parece ser la antesala del regreso de varios que en estos dos años han permanecido en los

claroscuros de la política, a la espera de una oportunidad y con deseos de recuperar protagonismos, influencias o

simplemente cuotas de poder.

En los partidos de gobierno ocurre algo parecido. Un cansino Eduardo Frei ha manifestado su disponibilidad para asumir

nuevamente la conducción de la DC y desde ahí proyectarse como posible candidato de la Concertación. La senadora

Soledad Alvear también ha expresado su intención de “repetirse el plato” en la conducción del partido.

En el PS ocurre algo muy similar. Los preparativos para el congreso de marzo de 2008 y para las elecciones internas así

lo demuestran. Seguramente el senador Camilo Escalona intentará mantenerse en las primeras filas de la dirección del

partido mientras otros agrupamientos internos buscarán construir una alternativa de conducción, de liderazgo y de gestión

partidaria que rompa las lógicas y dinámicas obsecuentes y excluyentes instaladas durante su conducción. Es más, ya

se anuncia el eventual regreso de José Miguel Insulza a Chile y a la política partidaria.

Recordemos que recientemente en el PRSD fue electo el senador José Antonio Gómez. En tanto en el PPD, sin duda las

próximas elecciones serán algo más tranquilas y seguramente sus liderazgos y dirigencias propenderán a la unidad

partidaria, al fortalecimiento del partido y a obtener una mayor presencia en las elecciones municipales del 2008 y en las

parlamentarias del 2009, sin que ello signifique necesariamente renovar los liderazgos y las dirigencias internas. La

oposición interna prácticamente fue inducida a dejar el partido, y por tanto, a construir alternativas políticas fuera de sus

filas.

En los partidos de derecha la democracia interna no deja de ser una noble aspiración de sus militantes. Tanto en RN

como en la UDI las opiniones que buscan ampliar los márgenes de representación interna y el surgimiento de nuevos

liderazgos rápidamente suelen ser neutralizados y acallados. Es conocido que en los últimos diez años el ejercicio del

poder ha rotado entre las mismas elites partidarias.

De ahí entonces que llame la atención el retorno de Francisco Vidal al gobierno, no sólo por cuestiones coyunturales, sino

porque ello sería la prueba palpable de la falta de voluntad por generar las condiciones necesarias para renovar los

liderazgos, las dirigencias y los estilos de hacer política de las elites, tanto en los partidos como en el gobierno.

En consecuencia, Francisco Vidal vendría a representar el retorno de los salmones a su lugar de origen, no sólo con el fin

de cumplir un ciclo, desovar y así prolongar a las actuales elites políticas en el poder, sino para asegurar que los

eventuales recambios de generaciones de liderazgos y de dirigencias conserven el ADN y la impronta de una generación

de políticos que, en términos generales, declaró querer cambiar las injusticias del sistema y terminó enamorándose de

sus supuestas virtudes.

Patricio Bustos Pizarro

Santiago, diciembre 16 de 2007

ACUERDO POR LA CALIDAD DE LA EDUCACION

ACUERDO POR LA CALIDAD DE LA EDUCACION El presente documento consagra el acuerdo alcanzado por el Gobierno de Chile, la Alianza y la Concertación para dar al país una nueva Ley General de Educación (LGE), que reemplace a la antigua LOCE, y que vele en forma eficaz por elevar la calidad de nuestra educación. Proponemos colocar en primer lugar a los niños y jóvenes de Chile.  El futuro del país está en la educación, por ello hemos aceptado dejar atrás algunas de nuestras posturas en pos de alcanzar un acuerdo. Los acuerdos muchas veces no resultan fáciles y siempre traen consigo renuncias y ésta no fue la excepción. Todos los aquí firmantes tuvimos que deponer alguna de nuestras pretensiones contenidas en los proyectos originales, pero lo hicimos porque por sobre todas las cosas está el bien de Chile y el futuro de nuestros hijos. Esta convergencia de voluntades, más allá de las divergencias, recoge el impulso al cambio proveniente de la sociedad y, en especial, de los jóvenes. La educación, tanto la recibida en la familia, como en la escuela, es la herramienta principal para alcanzar el desarrollo y la equidad. Esto justifica el consenso logrado. Gracias a este acuerdo nuestro sistema escolar podrá contar en el futuro con nuevas instituciones y marcos normativos que nos permitirán avanzar hacia una educación de calidad para todos: 1.         Una institucionalidad pública más sólida que permita dotar a nuestra educación de un sistema de aseguramiento de la calidad.  La educación y sus políticas públicas no deben estar sometidas a los vaivenes políticos de corto plazo y tampoco responder a la visión de un solo sector político.  Los países exitosos son aquellos que poseen una institucionalidad que persiste a lo largo del tiempo en la búsqueda de mejorar la cobertura y la calidad educativa. Este acuerdo refleja lo anterior, y por eso hemos concordado que junto al Ministerio de Educación, exista una Superintendencia de Educación, una Agencia de la Calidad y un nuevo Consejo Nacional de Educación  que reemplace al actual Consejo Superior de Educación. Este conjunto de instituciones públicas tendrá como tarea central velar por la calidad educativa de nuestro sistema escolar, y por  que las oportunidades para nuestros niños y jóvenes se distribuyan con equidad. Lo anterior será posible a través de la definición de estándares de aprendizaje comunes a todos nuestros establecimientos educativos, y a mecanismos de aseguramiento del cumplimiento de dichos estándares. En este contexto hemos concordado en consignar en nuestra Constitución Política el rol del Estado de velar no sólo por el acceso a la educación, sino también por la calidad educativa. 2.         Definición clara de los roles de cada uno de los actores de la comunidad educativa.  El acuerdo define con precisión los deberes y derechos de los miembros de la comunidad educativa, incluyendo en  éstos a los alumnos, los padres y apoderados, los profesionales de la educación, los asistentes de educación, los sostenedores y los equipos directivos. Asimismo, se determinan los objetivos de aprendizaje de los distintos niveles educativos, incorporándose el nivel parvulario. De esta manera, se precisan las responsabilidades y los objetivos de aprendizaje que los niños y niñas deben alcanzar, permitiendo con ello una adecuada rendición de cuentas para asegurar el objetivo principal: mejorar la calidad de la educación chilena. 3.         Una nueva estructura curricular para elevar la calidad de la educación.  Se ha acordado modificar gradualmente la estructura curricular del sistema educativo nacional. De esta forma la educación primaria tendrá una duración de 6 años y la secundaria otros 6, con cuatro años de formación general y dos de formación diferenciada. La nueva estructura nos acerca a lo que ocurre hoy en los países con mejores resultados educacionales. Contaremos con Bases Curriculares referidas ahora a los aprendizajes e incorporaremos, por primera vez, objetivos referidos a la lengua materna indígena. Tendremos así nuevas condiciones para mejorar significativamente el qué y el  cómo se enseña en las escuelas y liceos del país.  4.         Garantizar la eficiencia y la transparencia de todo el sistema educacional. Hemos concordado la aplicación de un exigente sistema de selección de los administradores educativos, de fiscalización del cumplimiento de la normativa y de transparencia en el uso de los recursos públicos involucrados en el proceso educativo. Así, los sostenedores deberán ser personas jurídicas y poseer giro único dedicado a la educación. La calidad de sostenedor será intransferible a quienes no cumplan con los requisitos requeridos por la ley, debiendo éstos acreditar solvencia económica.  Elevando las exigencias para ser administrador educacional estaremos efectivamente resguardando que la educación que reciben los niños y jóvenes chilenos sea del mejor nivel. 5.         Asegurar y desarrollar la autonomía.  La autonomía es un requisito fundamental para asegurar la calidad de la educación, ya que permite a los establecimientos educacionales innovar y recoger las experiencias exitosas nacionales e internacionales y hacerse responsables de sus resultados.  Para hacer operativa esta autonomía se establece la existencia, entre otros, de un Banco de Programas complementario al programa oficial del Ministerio de Educación. Los planes y programas contenidos en este banco deberán cumplir con los objetivos nacionales de aprendizaje y deberán estar a disposición de todos los establecimientos que los quieran utilizar. Además se contempla un tiempo de libre disposición en las bases curriculares y en los planes de estudios elaborados por el Ministerio de Educación, de tal forma que cada establecimiento tenga la posibilidad de profundizar materias y/o agregar conocimientos específicos que sean propios de su proyecto educativo. 6.         Normas de no discriminación arbitraria y selección. Se ha acordado establecer normas para asegurar que los procesos de admisión de cada establecimiento escolar sean transparentes, objetivos y no discriminen arbitrariamente. Asimismo, se establece que cada establecimiento debe tener e informar su proyecto educativo. Además, el acuerdo establece que los establecimientos subvencionados entre pre kinder y sexto año básico no podrán considerar los méritos académicos de los alumnos como un criterio para admisión de los mismos. En materia de repitencia escolar el acuerdo establece que se deberá mantener al alumno en un mismo establecimiento, aún cuando éste hubiese repetido una vez en el ciclo básico y/o una vez en la media.  7.         Financiamiento. Valoramos los avances que se han realizado en materia de incremento de la subvención escolar. Particularmente los nuevos recursos que contempla el proyecto de ley de subvención preferencial, el incremento parejo a la subvención escolar de un 15%, y los reajustes especiales para las escuelas rurales y la educación de adultos. Educar  con calidad significa contar con los recursos adecuados para que se puedan cumplir los estándares de aprendizaje que se definirán para el conjunto de nuestras escuelas y liceos. Este financiamiento debe ser mayor para aquellos alumnos más vulnerables y con menor capital cultural, pues allí la tarea educativa es más compleja y desafiante. 8.         Un nuevo Consejo Nacional de Educación: El propósito común de elevar la calidad de la educación chilena requiere de instituciones que tengan una mirada de país y de largo plazo y cuyo único propósito sea una mejor educación para todos los chilenos. Por eso hemos acordado crear el Consejo Nacional de Educación, en reemplazo de actual Consejo Superior de Educación. Este nuevo Consejo se compondrá con miembros de excelencia y alta calificación en la materia y que representen a los actores de la educación y todos los sectores de opinión que forman parte de la comunidad nacional. Sus integrantes permanecerán en sus cargos por un periodo que vaya más allá de los ciclos electorales. Así, esta institución será clave para asegurar la calidad de la educación, pues tendrá  más y mejores atribuciones para orientar, evaluar y corregir las metas, procesos y mecanismos del sistema educacional, en materias tan decisivas como el currículo, los estándares de aprendizaje, y los planes y programas. 9.         Mantener y desarrollar un sistema educacional de provisión mixta: Históricamente la educación en Chile ha sido provista de manera mixta. Es responsabilidad del Estado mantener y desarrollar un sistema de educación, gratuito y de excelencia. Junto con ello debe velar por la eficaz realización de la libertad de enseñanza y del derecho a una educación de calidad a través del apoyo todas las escuelas, sean públicas o privadas, aumentando así, la diversidad de los proyectos educativos en nuestro sistema escolar. Ello es una condición indispensable en una sociedad democrática y plural, que valora todas las expresiones culturales y religiosas que conviven en su seno.  El Acuerdo alcanzado se materializará en una indicación sustitutiva acompañada del correspondiente mensaje que reemplazará al proyecto de Ley General de Educación enviada por el Gobierno al Parlamento, como asimismo a la propuesta legislativa realizada por la Alianza. Además, este acuerdo significa adecuar en las materias pertinentes los proyectos de ley sobre reforma constitucional, Subvención Preferencial, de Superintendencia de Educación y de las demás leyes que sobre la materia hoy se tramitan en el Congreso. También  forman parte integral de este acuerdo los textos legales específicos sobre algunas de las materias concordadas. Estamos seguros de que este acuerdo permitirá al país avanzar en forma clara y decidida hacia una educación de calidad para todos. Hacemos un llamado a toda la sociedad chilena y en particular a los actores del proceso educativo a trabajar con el único norte de dar a nuestros niños y jóvenes más y mejores oportunidades sobre la base de una educación de calidad.  Noviembre, 2007

APORTE AL DEBATE EDUCACIONAL Autor: Nelson Viveros

PARTIDO SOCIALISTA DE CHILEBRIGADA DE TRABAJADORES SOCIALISTAS DEL MINEDUC - BTSMIV CONFERENCIA NACIONALSantiago, 10 de Noviembre de 2007 APORTE PARA EL DEBATE SOBRE POLÍTICA EDUCACIONAL
I.
Introducción.La Educación para el Partido Socialista ha sido siempre una de las preocupaciones más relevantes en su quehacer teórico, político y práctico. Dirigentes y militantes socialistas en diferentes esferas societales han contribuido en convertir al Socialismo Chileno en un actor protagónico del devenir educativo del país. Por tanto, en la actual coyuntura, en que la educación nacional -al igual que el conjunto de la realidad económica, social y política-, experimenta una aguda crisis que requiere soluciones estructurales, de fondo, los aportes que le corresponde hacer el P.S. para contribuir a dilucidarla no parten de cero. Para no ir muy lejos dentro del acerbo socialista, la formulación propositiva más cercana lo constituye el voto de la Comisión de Educación en el Consejo General del Partido de Marzo pasado, en el cual se establece un conjunto de definiciones, ideas y propuestas que sirven de punto de partida a este documento.   II. Sentido y contexto de las propuestas. El país está viviendo un período que exige soluciones fundamentales, de otra forma no es posible enfrentar los agudos e impostergables desafíos que vive nuestra Sociedad, originado por el modelo neoliberal heredado de la dictadura y sus terribles e insostenibles efectos en todos los ámbitos de la vida nacional, so pena de enfrentar situaciones cada vez peores en costo humano, social y político. Para ello, es urgente terminar con el actual modelo de desarrollo del país y reemplazarlo por otro que extienda y profundice la democracia, termine con las injusticias, las profundas inequidades, falta de oportunidades y exclusiones que afectan a la mayoría de la población chilena, impida la aguda concentración económica y la depredación del medio ambiente y los recursos naturales, que fortalezca el rol de las organizaciones sociales, el Estado y sus instituciones, y permita el desarrollo sustentable, inclusivo, integral, pleno y feliz de las personas y la Sociedad. La educación, como el resto de las funciones sociales del país, experimenta los crueles efectos del modelo impuesto a sangre y fuego. Los mismos tres ámbitos en que se ha estructurado el debate de nuestra Conferencia Nacional (que son los mismos que se desarrollaron en el Consejo Nacional del Partido y en el Consejo Asesor Presidencial, creado por la Presidenta luego de la rebelión pingüina), nos permiten refrendar lo anterior. El entramado jurídico, legal y normativo de la educación (“Marco Regulatorio”) cruje por todos lados, no se sostiene ni siquiera para seguir funcionando dentro del marco general del modelo; menos para permitir la solución de las justas y legítimas expectativas de las nuevas generaciones, sus familias, ni para el desarrollo del país. Algo similar ocurre con las actuales estructuras  e instituciones del Sistema Escolar, la Educación Superior y del Estado en el Sector (“Institucionalidad de la Educación”). Las instituciones educativas fiscales y, particularmente, el Mineduc, han sido llevadas a un agudo y progresivo estado de debilitamiento e incapacidad, de casi colapso, al igual que el resto de los Servicios Públicos, producto del inocuo rol subsidiario respecto del “mercado” que se les ha impuesto y se les continúa en esencia otorgando, a pesar de los cambios menores efectuados por los gobiernos de la Concertación. Dadas las anteriores consideraciones, la “Calidad Educativa” presenta serias deficiencias respecto a las expectativas, necesidades y anhelos de las personas, las familias y la comunidad, a quienes el modelo les impone en lo fundamental imposiciones y obligaciones, no la valoración propia de seres humanos, sujetos de derecho, ciudadanos investidos de plenas e inalienables prerrogativas personales, cívicas y sociales. Esta situación no acepta más indefinición, postergación ni ambigüedades. Requiere, exige, soluciones sustantivas. Políticas, no técnicas. De profundidad y envergadura, no superficiales y menores. Por tanto, éstas no serán la obra de la genialidad de unos pocos, por ilustrados, competentes e iluminados que pudieran ser, sino el producto de un gran Movimiento Social. Tan grande, trascendente, audaz y creativo como nos fue planteado a todos los chilenos durante el tsunami de los jóvenes estudiantes secundarios del 2006, que ayudó decisivamente a impulsar la comprensión de la necesidad de asumir la solución de estas exigencias impostergables. III. La actual coyuntura de una estrategia de cambios sustantivos. Se ha hecho claro para todos que lo que se debe afrontar son cuestiones estructurales y estratégicas, las que por su misma naturaleza les competen e interesan no sólo a quienes están directamente ligados a la educación sino al conjunto de la Sociedad, especialmente a los excluidos y postergados. Las demandas y cambios aspirados requieren una potenciación real e integral del Estado, como garante del ejercicio efectivo de los derechos y libertades educativos de toda la población, y en ese mismo proceso resolver el conjunto de los déficits democráticos y de justicia social que cruzan a la Sociedad Chilena. Esta lucha se enmarca en la actual coyuntura económica, política y social que vive actualmente el país, la que se caracteriza entre otros por los siguientes elementos: 1.       La discusión y aprobación del Presupuesto de la Nación 2008: El cual si bien contiene mejoramientos en gastos sociales, su promedio no supera el 9%, en medio de una inflación que se acerca al 7% y un crecimiento del país que superará el 5%. Esto confirma la hegemonía que tienen en el Gobierno los personeros neoliberales (como parte de las “dos almas” de la Concertación), que niegan el uso de los inmensos recursos dejados por el alto precio del cobre y el crecimiento del país para mejorar la pésima distribución de la riqueza[1], que genera la indignante pobreza de millones de chilenos, una alta e intolerable desigualdad e impide la integración social. 2.       El negativo impacto del Transantiago y otras pésimas políticas de gobierno en la dignidad, condiciones de vida y anímicas de los trabajadores y el mundo popular.3.       La crisis de representación política del “país real” y la baja de calidad de la actividad política, que aleja cada vez más a amplios sectores de la Sociedad de los partidos de la Concertación (y hace aparecer díscolos, grupos de disensos y una “chimuchina” interna en todas las filas políticas).4.       La creciente agresividad del mundo empresarial contra toda forma de avance de las ideas y las acciones democráticas y progresistas.5.       El interesado y renovado interés del establishment del modelo por que se impulse la modernización del Estado y su capacidad de gestión[2], pero en provecho propio.6.       El reciente impulso a un proceso de “unidad nacional” entre el gobierno y la derecha, para resolver materias cruciales como seguridad ciudadana, la educación, la reforma previsional, la reforma laboral y otras, pero en la cual no tienen cabida las organizaciones sociales.7.       La gran vocería que tiene el Ministro de Hacienda en materias relativas al Estado y los asuntos laborales, que representa el “alma” más liberal del Gobierno. No obstante estas amenazas, existen otros factores positivos o de fortaleza para el mundo popular:    1.       El avance de las ideas y los valores democráticos en el país y Latinoamérica (en casi una decena de países del área se han elegido a presidentes de raigambre popular y progresista, haciendo retroceder a los sectores reaccionarios y de derecha).2.       El positivo impacto en la conciencia nacional creado por las afirmaciones del obispo Goic sobre el llamado salario ético.3.       El llamado calentamiento social, cuyos puntos más altos del último tiempo fue la revolución pingüina, las exitosas luchas sindicales de ANEF, los trabajadores subcontratados de Codelco, Celco, Agrosuper y la movilización nacional convocada por la CUT el pasado 29 de Agosto.4.       Los nuevos liderazgos emergentes en el mundo social y sindical, quienes asumen el rico legado histórico y lo ejercen con gran consecuencia, creatividad y combatividad.5.       Los procesos de convergencia y unidad en el Movimiento Sindical Mundial y Latinoamericano, que comienzan a influir positivamente en Chile.6.       Las decisiones progresistas adoptadas por el Congreso Ideológico de la D.C. y la firme posición del P.R. sobre educación.7.       Las próximas elecciones generales que están a la vuelta de la esquina (concejales y alcaldes). Todas estas situaciones y otras que pudieran apuntarse, configuran una situación compleja y contradictoria que nos exige un intenso y permanente esfuerzo análitico, una clara y firme estrategia, alto espíritu de lucha, gran ductibilidad táctica, la necesidad de una fuerte unidad y cohesión política, tanto interna como con nuestros aliados.  IV. Nuestras propuestas de cambios sustantivos. 1.       Sobre Marco Regulatorio. a)       Hacemos nuestro lo afirmado por el Consejo Nacional del Partido: Para los socialistas es fundamental fortalecer el rol del Estado haciéndolo activo, responsable, fiscalizador, orientador y, en general, garante efectivo del ejercicio real de los derechos y libertades educativas, con calidad para toda la población y la participación democrática de todos los actores sociales e institucionales del Sector. b)       El privilegio del derecho de toda la población a una educación de calidad por sobre la libertad de enseñanza. Esto requiere la modificación constitucional que consagre ese derecho y sustituir la LOCE por otra ley que fije valores y principios, acordes con los cambios institucionales, sociales y personales deseados.  c)       Esto implica reemplazar el individualismo, la exclusión, la deshumanización, el autoritarismo, y la imposición, por los valores democráticos del respeto, la solidaridad, la tolerancia, la inclusión; lo que implica un cambio sustantivo, integral, “de carácter revolucionario y no de simples reformas dentro del actual modelo educativo” (Consejo Nacional del P.S.).  d)       Dada la actual correlación de fuerzas en el Congreso, es imprescindible y estratégico impulsar un debate en toda la Sociedad, que asegure una amplia comprensión y el compromiso con los cambios, lo cual puede implementarse con la realización de un plebiscito nacional que exija la aprobación parlamentaria de la legislación requeridas para modificar la Educación Chilena.  e)       En esencia, los socialistas propiciamos el fortalecimiento y el desarrollo de la Educación Pública otorgándole, facultades y recursos que requiera para mejorar en forma drástica su calidad. f)         Como la educación no debe ser un negocio y constatado que la legislación vigente permite lucrar con recursos públicos, se propone cambiar el actual modelo de educación particular subvencionada en todos los niveles y modalidades, para evitar  la apropiación indebida por privados de recursos que pertenecen a todos los chilenos. g)       En la educación particular subvencionada sólo deben participar instituciones privadas sin fines de lucro. h)       Los socialistas proponemos que exista una regulación mucho más activa por parte del Estado en lo relativo a la creación y al aseguramiento de la calidad en las carreras de Educación Superior que imparten instituciones privadas. i)         Proponemos que se estudie y resuelva, de manera fiscalmente responsable, pero socialmente significativa, la asignación de los recursos de la Ley del Cobre que benefician a las instituciones armadas; de los excedentes que eventualmente generen altos precios del cobre; y de los recursos producto del royalty minero, destinando parte significativa de ellos a la educación pública en todos sus niveles y modalidades, incluyendo la investigación en ciencia y tecnología. j)         Para posibilitar la obtención de los propósitos planteados en nuestra propuesta, los socialistas apoyamos un incremento creciente del aporte estatal a la educación, de modo que hacia el año 2010 se pueda llegar a un 7% del PIB. Cabe recordar que en 1972 el aporte estatal a la educación alcanzaba el 6,2% del PIB. k)       El financiamiento de los colegios debe posibilitar la total gratuidad en todos los niveles y modalidades que son obligatorias. Para ello se debe asegurar que el financiamiento se efectúe de acuerdo a:  ·         Financiamiento basal que considere un piso estándar por curso e incrementos ligados a proyectos o planes de logro que la comunidad escolar demande;·         Asignación de recursos públicos sobre la base de territorialidad y vulnerabilidad social de la población atendida;·         Asignación de recursos vinculada al cumplimiento de metas comprometidas en la calidad de la educación que se entrega. l)         Con  el fin de asegurar el correcto empleo de los recursos públicos, el Ministerio de Educación debe contar con las atribuciones  y los medios necesarios para efectuar su estricta fiscalización .

2. Sobre Institucionalidad de la Educación.
 a)       Los socialistas demandamos la refundación de la institucionalidad del sistema educacional, para que tenga carácter público, descentralizado, especializado y de base territorial, que posibilite una buena administración. b)       Diversos diagnósticos muestran irrefutablemente que la educación municipalizada, heredada de la dictadura,  se encuentra en una crisis irreversible por lo que planteamos su término y que los colegios públicos retornen al Estado, en instancias descentralizadas de carácter provincial. c)       Debemos impulsar el fortalecimiento de la Educación Superior Pública, que garantice el acceso a los estudiantes meritorios y de escasos recursos y que sea referente de la más alta calidad para el resto del sistema, en todos sus niveles (técnico superior, pregrado y postgrado).d)       Es urgente reformar los estatutos de las Universidades Públicas, para democratizar su gobierno y permitir la participación de todos sus estamentos en su proyecto institucional.e)       Respaldamos un proyecto de ley que permita la creación de Centros de Formación Técnica estatales, especialmente de los surgidos al alero de las Universidades Públicas, considerando que sólo existen Centros de Formación Técnica privados para impartir educación técnica superior, sector fundamental para sustentar el desarrollo socioeconómico nacional. f)         Es necesario fortalecer una política de articulación entre educación formal, informal y no formal, en el marco de un sistema de educación permanente que favorezca el progresivo desarrollo integral de todos los chilenos y chilenas.

3. Sobre Calidad de la Educación. a)       Los criterios de calidad que se demanden al sistema educativo deben ser coherentes y contribuir efectivamente a materializar el proyecto de Sociedad que queremos construir, en consecuencia es inaceptable la selección de los estudiantes en los distintos niveles de la Educación Escolar.b)       Los socialistas sostenemos que el problema de la educación chilena no es únicamente de financiamiento o de gestión, aunque el financiamiento ocupa un lugar importante en la solución de los problemas que el sistema educacional presenta. También creemos que hay un vínculo estrecho entre financiamiento y la calidad de la gestión y administración de los colegios y del sistema escolar.c)       Los socialistas postulamos institucionalizar la educación pre-escolar, lo que requiere atender no sólo la ampliación de la infraestructura, sino también por tener en cuenta el punto de partida de los educandos en términos de nutrición y salud, así como también la calidad de la educación que en tales establecimientos se imparte, incluyendo su prolongación hacia los padres y sus familias.  4.       Sobre el Ministerio de Educación.Un capítulo de gran relevancia para la BTSM  es contar con ideas y propuestas respecto al Mineduc. En consecuencia: a)      Los socialistas postulamos que la misión del Mineduc debe reflejar una visión de justicia social, participación, solidaridad, igualdad de oportunidades y un cabal desarrollo educacional y cultural.b)      El enunciado de esta Misión es: Asegurar el ejercicio efectivo del derecho a una educación de calidad, democrática, humanista, justa, diversificada, equitativa, de excelencia en todos sus niveles, y durante toda la vida del conjunto de los habitantes de Chile, con la participación de la comunidad nacional, cautelando la identidad, diversidad y acrecentamiento del patrimonio étnico, cultural, científico y tecnológico al servicio del Proyecto de País.c)      Poner en práctica nuestra misión requiere una real y extendida capacidad de decisión a todo nivel. Esto significa fortalecer e incentivar la capacidad de las personas para organizarse en su trabajo y actuar en equipo con libertad, flexibilidad y autonomía en el ejercicio de sus funciones. d)      Se debe contar con una visión global de lo que se está haciendo. La institución debe realizar un esfuerzo acrecentado, tanto para informar, como para formar y desarrollar a los funcionarios en el cumplimiento de sus tareas. El propósito deseado es que estos perciban claramente de qué manera la función que están realizando forma parte del cumplimiento de los objetivos generales de la organización.e)      Una comunicación y participación permanente e informada. Los principios de gestión indicados serán realizables sólo si se cumplen los propósitos de crear un método y un estilo de dirección que favorezcan un clima organizacional sano y participativo, que exige una clara disposición de las autoridades para aportar una comunicación permanente, tanto vertical como horizontal, que garantice la información a todos los niveles, y asegure condiciones de  transparencia que aseguren la práctica de los principios de ética y probidad institucional, y una constante preocupación por mejorar la calidad del servicio que se presta a la Sociedad, con la correspondiente  dignificación de su misión y sus trabajadores.   Nelson Viveros Lagos


[1] La última Encuesta Casen dejó al descubierto la existencia de un millón de trabajadores que perciben un ingreso menor al sueldo mínimo ($108.000). Además, 2 millones de personas viven bajo la línea de la pobreza, mientras grandes intereses inmobiliarios siguen eximidos desde 1987 de tributar en un 65%, lo que resta al fisco alrededor de US$ 3.000 millones (a esto debe sumarse la gran evasión y dilución tributaria todavía existentes).

[2] El Ministro de Hacienda muy sensible a estas demandas, ya echó a andar un proyecto de Fondo Concursable para instituciones externas (mayoritariamente privadas) con el fin de “mejorar la gestión pública”, pero el cual está negado para organizaciones sindicales u otras instituciones de carácter progresista). 

NUEVA LEY GENERAL ..... Autor: Alvaro Labra Labra

           Nueva ley general, Calidad Educativa y Perfeccionamiento Docente.   La educación trasciende a cualquier Sistema Educacional: es  preservación y proyección de la cultura; de la identidad personal y nacional.  De aquí que es más necesario que nunca el rediseñar una educación que eleve y  maximice la formación personal, valórica, democrática y respetuosa de la diversidad ciudadana. Una Educación comprometida con los derechos humanos; con una conciencia ética fundada en valores tan relevantes como: la libertad, la justicia, la participación, la conciencia de la dignidad humana; el ejercicio de los deberes y derechos de los sujetos, el espíritu solidario y el sentimiento de pertenencia y de identidad nacional en un marco de respeto a la mantención y recuperación del entorno ecológico y la construcción de un modelo de desarrollo equitativo y sustentable.     La deficiente calidad de la educación constituye el nudo central de nuestro Sistema Educacional; la Presidenta Bachelet coloca el acento en la calidad en el proyecto de la Nueva Ley General de Educación al afirmar: “Que el desarrollo integral de los alumnos no pasa sólo por el logro de estándares de aprendizaje; su objetivo central es brindar una formación que abarque competencias – conocimientos y valores sustentados en la democracia y solidaridad; generando asimismo un diseño de instrumentos válidos para la implementación de un Sistema Nacional de Evaluación de Logros de Aprendizajes” más adelante establece “Que es deber del Estado garantizar la gratuidad hasta la Educación Media y la calidad de la educación; así como la equidad y la igualdad de oportunidades e inclusión”.La Nueva Ley General surge en un contexto donde la antigua LOCE no garantiza la existencia de buenos centros educativos, accesibles a los hijos de núcleos familiares de menores ingresos; los recientes resultados del SIMCE así lo avalan, alrededor del 40% de los educandos de 4to Básico no se han apropiado de las competencias mínimas en Lenguaje y Matemáticas; el panorama se vuelve más oscuro con el rendimiento en los segmentos más vulnerables, donde  más del 50% de los alumnos de los grupos socioeconómicos bajos y medio – bajos no han asimilado dichas competencias, reafirmando con ello que las condiciones de origen y las características de los establecimientos educacionales de los estudiantes, salvo honradas excepciones, condicionan sus capacidades en el aprendizaje.  Pero lo que más debe preocupar a los socialistas es que en lo sustantivo en los 10 últimos años no han mejorado los aprendizajes de los educandos de acuerdo al progresión de las condiciones socioeconómicas del país y de las mayores inversiones del Estado en Educación, lo que nos lleva a pensar que no necesariamente un mayor gasto en educación se convierte automáticamente en un aumento de la calidad del Sistema Escolar. El aseguramiento de la calidad de la educación se apoya en el mejoramiento continuo de los procesos y resultados de los aprendizajes que alcanzan los educandos en un nivel determinado, considerando el origen y acumulado cultural. Cada establecimiento educativo debe establecer su misión – objetivos y estrategias en armonía con sus profesionales-docentes y entorno para materializar el currículo nacional  y lograr los estándares definidos por el sistema escolar; sistema que debe impulsar y potenciar las capacidades para que cada centro educativo pueda gestionar procesos de calidad y proveer el apoyo pertinente, financiando convenientemente los costos y reconociendo oportunamente los esfuerzos y progresos de las escuelas y liceos. La evaluación debe estar al servicio de estos procesos de calidad, desarrollando las fortalezas y determinando las debilidades para trascenderlas. De igual manera debería continuar estimulándose la autonomía responsable en la gestión de todos los establecimientos educacionales, en el marco de una transparencia que pasa por la rendición de cuentas, por los resultados de su gestión, de su desempeño y balance de gastos e ingresos; fiscalizando de igual forma el estricto cumplimiento de las normas y consistencia de la información suministrada a sus usuarios.La nueva ley coloca el acento en a lo menos cuatro elementos.  Establece mayores exigencias de calidad, un mejor Sistema de Evaluación y eventualmente sanciones para los que no logran avances y lo que es más importante un mayor compromiso del Estado con los sectores más desvalidos; variables muy relevantes e importantes; no obstante lo que más nos preocupa  es la formación inicial y continua del profesional – docente, como eje central de los procesos educativos, es vital desarrollar una política de perfeccionamiento que los prepare y habilite sistemáticamente para la implementación del currículum escolar, didáctica de su disciplina, sistema de evaluación pedagógica, entre las más relevantes.  Una estrategia válida para ir superando estas realidades que habría que complementar con el incremento de la cantidad y calidad de la utilización de las horas no lectivas de los docentes a través de un programa continuo, sistemático e intensivo de perfeccionamiento de nuevas capacidades didácticas y pedagógicas de los profesionales docentes que, por supuesto, deben ser monitoreados y evaluados en forma permanente, por las respectivas UTP ( tópico que ampliaremos en nuestro análisis y propuestas en documento que se adjunta: la Formación Inicial, perfeccionamiento y condiciones laborales de los docentes ).Por otro lado, es necesario que los centros educativos de mayor calidad eliminen las cortapisas y provean de mayor información a las familias de menos ingresos. En esta perspectiva el proyecto de Gobierno va en la dirección correcta al limitar la discriminación de los centros educativos; sería necesario además complementar esto con la incorporación en la ley de un artículo que señale que la capacidad de pago no constituya un impedimento para el ingreso de los estudiantes a un establecimiento subvencionado por el Estado y que no sea válido exclusivamente para algunos colegios municipalizados.Para que el sistema de sanciones opere es necesario que se den copulativamente a lo menos tres condiciones: primero que los centros educativos cuenten con los recursos, oportunidades y tiempos necesarios para mejorar; segundo, que el sistema en su conjunto sea equitativo y no se dé una especie de “competencia desleal”, presente cuando algunos colegios seleccionan, expulsan y cobran a los educandos y otros no, y tercero, que se cuente con los instrumentos efectivos y/o alternativas válidas para mejorar los procesos de la calidad.  Dadas estas tres condiciones es necesario examinar cuales serían las estrategias adecuadas para superar la incapacidad de lograr los estándares mínimos de calidad; lo que en algunos casos puede pasar por la mejoría de los procesos de gestión, en esta eventualidad se podría explorar un par de estrategias: las escuelas y liceos deberían incorporar procesos de mejoramiento continuo que los conduzca a la retroalimentación permanente en la perspectiva de instalar un aprendizaje escolar e institucional permanente en los Centros Educativos y  requerir el apoyo de gestores de probada calidad y/o permitir la gestión educativa plurianual ligadas a metas especificas, y como última instancia cancelar definitivamente el funcionamiento de los establecimientos que persisten en una prestación de mala calidad e irregularidades, resguardando eso sí la continuidad del proceso educativo de los estudiantes afectados ( a vía de ejemplo las permanentes irregularidades y abusos de los colegios particulares subvencionados San Andrés de Talca, a cuyos propietarios lo único que les interesa es el lucro en desmedro de la calidad de los aprendizajes de sus alumnos y humillación de sus profesionales-docentes actualmente despedidos en su mayoría, generando con ello un daño irreparable a la comunidad educativa y su entorno inmediato ), ¡¡¡ por esto y miles de casos más no  al  lucro en educación que se negocia con la derecha!!!. En cuanto al aumento de las exigencias presentes en la nueva ley respecto a los sostenedores, adicionalmente se podría indagar si existe realmente una carencia de centros educativos en los lugares donde se peticiona la instalación de nuevos centros educacionales, resguardando con esto la inversión pública en educación.En definitiva la propuesta de la Nueva Ley General de Educación asume la mayoría de los elementos necesarios para potenciar el mejoramiento del Sistema Educativo Chileno y su efectividad estará ligada al complemento que se alcance con otras Reformas Institucionales como la Superintendencia de Educación, a vía de ejemplo, con el despliegue de un conjunto de políticas, programas y proyectos de mejoramiento direccionados a hacer más consistente y efectivo el proceso de reformas dentro de la reforma, en la búsqueda de la optimación de la calidad de los procesos educativos.                                                                          Álvaro Labra Labra                                                          Magíster en Política y Gestión  EducacionalTalca, mayo de 2007

FORMACION INCIAL Autor: Alvaro Labra Labra

Formación Inicial – Perfeccionamiento y Condiciones Laborales de los Docentes. 

Si bien la Reforma Educativa que se comienza a perfilar a partir de los 90 ha transformado significativamente el andamiaje escolar chileno; producto del aumento sustantivo de la inversión estatal en la construcción de programas curriculares innovadores, instrumental   pedagógico -    didáctico, mejoramiento salarial, perfeccionamiento docente, e infraestructura educacional; no es menos válido que existe la percepción de que esto no ha tenido su correlato con los procesos de enseñanza - aprendizaje en el aula: en efecto, se percibe que los ritmos de avance en los procesos educativos son lentos y que un porcentaje no menor de profesionales - docentes asume sólo discursivamente las innovaciones curriculares y didácticas. Lo anterior obliga a optimizar la gestión escolar y fundamentalmente la calidad de los procesos de enseñanza - aprendizaje en la sala de clases, para lograr esto hay que mejorar sustancialmente la formación inicial y la preparación de los docentes en el tratamiento del nuevo currículum y aumentar la eficacia de los apoyos para alcanzar tales objetivos.

 Nuestra segunda preocupación como socialistas pasa por la formación de los futuros cuadros docentes, especialmente de aquellos que están egresando de universidades no acreditadas por el Ministerio de Educación. ¿¡Hasta cuándo se permite la anarquía en la formación de una profesión tan delicada e importante para el futuro del país!?; en efecto, el drama de la formación inicial del profesorado; donde conviven las 17 universidades acreditadas (con ingresos de alumnos con más de 600 puntos en la P. S. U.), las universidades privadas (donde, por lo general, ingresan los que no quedaron en las universidades tradicionales o acreditadas), y por último los ¿formados? A distancia o con clases los fines de semana, lo que obviamente no asegura una calidad profesional adecuada y pertinente; de aquí que los socialistas tenemos la obligación de luchar por aumentar la calidad y equidad de una educación que a maximizado su cobertura, pero que no ha tenido la capacidad suficiente para incorporar los dominios de un conocimiento actualizado y contextualizado, estrategias metodológicas apropiadas y de una tecnología cada día más sofisticada y con un proceso de enseñanza - aprendizaje humanizador y pluricultural que se apropie de la historia y valores locales, ligados a lo mejor de la cultura universal: preparando así al futuro ciudadano como agente activo y creativo, capaz de generar proyectos personales y profesionales, auto organizarse y liderar procesos en los distintos niveles del cuerpo social. Si estas percepciones son correctas llevar la reforma a la sala de clases e incrementar la equidad y calidad pasa. necesariamente, por formar profesionales docentes armados de un manejo curricular que les permita desarrollar una pedagogía efectiva y eficiente; capaces de vincular los contenidos específicos de cada nivel, especialidad y/o asignatura con una transversalidad que enriquece la formación personal del estudiante, dando paso con esto al reconocimiento de la centralidad de la persona en un universo cambiante y diverso, para enfrentar además con posibilidades, el creciente proceso de segmentación en los aprendizajes e instalar los fundamentos de una verdadera cultura educativa: creativa, crítica, responsable y democrática.Hoy es más necesario que nunca despejar al menos 3 interrogantes:1.      ¿Qué tipo de educación queremos y para qué desarrollo? 2.      ¿Qué tipo de universidades deberían intervenir en la formación inicial del  profesional - docente? 3.      ¿Cuáles serían los procesos de selección a que deberían ser sometidos los  aspirantes a pedagogos? Las respuestas parecieran ser obvias: 1.      Una educación de calidad formadora de sujetos creativos, competentes, críticos y responsables de la construcción de una democracia que distribuye con justicia el producto de su crecimiento y desarrollo. 2.      La formación inicial docente debería ser otorgada sólo por universidades (con mallas curriculares actualizadas y académicos validados en su experticia) realmente acreditadas por su calidad, seriedad, competencia e innovación. Más aún es necesario implementar - a 1a brevedad - La Escuela Única de Pedagogía, antigua aspiración del magisterio, que apunta a concentrar y formar todos los niveles y especialidades del cuerpo docente. 3.      Una selección estricta y justa (otorgamiento de becas a los estudiantes con carencias económicas) de los postulantes a pedagogía debe pasar por un puntaje superior a los 600 puntos en 1a PSU, y la inmediata aplicación de un examen psicológico y una batería de test que digan relación con la aptitud - actitud - vocación y real interés por la docencia. Sus condiciones laborales deberían asegurar a lo menos: una carrera con sueldos equivalentes al estrato medio - superior de las profesiones universitarias; la atención de cursos que no excedan los 30 alumnos; mayor cantidad de horas para la preparación de clases; un sistema previsional y de salud que otorgue seguridad - bienestar físico y psicológico inherente a una profesión de por si agotadora y estresante; un perfeccionamiento pertinente - contextualizado - coherente y permanente; una promoción profesional basada en competencias y antigüedad, asociada a una evaluación anual (evaluación que se debería extender a todos los profesionales públicos y privados). En suma, se trata de formar profesionales - docentes capaces de manejar las relaciones que se establecen entre el mundo de las ideas, el sistema educativo y la sociedad, y simultáneamente apropiarse de las teorías de la educación y sus connotaciones prácticas, para asumir así los lineamientos inherentes a un proceso educativo dinámico y cambiante, de modo que los objetivos - contenidos y actividades desplegadas en el aula estén realmente sustentadas en un cuerpo general y específico de conocimientos y valores formativos. Todo ello en un marco laboral y previsional cautelador de su salud física, mental y económica. 

                                                                       ÁLVARO LABRA LABRA                                                                   

                                                          Magíster en Política y Gestión  Educacional