ENCUENTRO CON SENADOR ALEJANDRO NAVARRO
El compañero Alejandro inicia su exposición muy preocupado por el problema político del Transantiago, los costos que pagara el gobierno y al concertación son muy altos para un programa de transportes demandado por todos, pero mal diseñado y mal implementado. Podemos perder el gobierno si no se corrigen rápidamente los problemas
La crisis educacional tiene el problema de los distintos enfoques que existen al interior de la Concertación. Desde ya no tenemos los votos para derogar la LOCE, no solo porque la derecha no esta de acuerdo, se necesitan 25 votos en el senado, sino porque hay diferencia en el bloque oficialista.
Algunos sostienen que ya se realizó el debate en educación por el informe del Consejo Asesor (80 personas). Otros sostenemos que no ha habido debate social, el pueblo, los estudiantes, los apoderados, las juntas de vecinos, los profesores no han participado masivamente.
El Consejo General del PS de marzo reciente saca una resolución en educación bastante potente que debería obligar a toda su militancia, pero temo que como este partido no es disciplinado cada parlamentario, cada integrante de la mesa y de la CP, se bajen por su propio proyecto sobre educación, lo cual va ha debilitar nuestras posiciones.
Como no tenemos los votos para la LOCE, y tampoco las vamos atener para las transformaciones estructurales en educación, que además será un proceso muy largo, que incluso esta mas allá de este periodo presidencial, la resolución en su parte final sabiamente da una salida al gobierno para enfrentar el tema, participación social, crear un gran debate nacional, con cabildos vecinales que obligue a todos los actores políticos a pronunciarse en educación. Única manera de sacar a la pizarra a la derecha y pasarle la cuenta en las próximas elecciones parlamentarias y presidenciales (solucionado el Transantiago).
El PS fijó su política educacional, debería abrir debate con los otros partidos de la concertación, pero nadie quiere debatir e incluso nuestro propio partido esta débil este ejercicio democrático. Para así solucionar las diferencias de la coalición y fijar acuerdos de los mínimos y máximos en educación. No lograremos todo lo que queremos los socialistas, pero en ese acuerdo se raya la cancha, para que los secundarios que volverán a movilizarse no disparen contra el gobierno sino que contra la derecha que no da los votos para los cambios a realizar.
Las leyes que se enviaran al parlamento están listas ¿Ustedes del Mineduc las conocen? , ahí tenemos una gran debilidad no puede ser que no exista participación y nadie conozca las leyes a proponer, como las va defender la sociedad, los apoderados, los secundarios, los profesores, etc.
Superintendencia en este actual modelo es muy complicado, se ha visto que las actuales que existen no funcionan para nada, son una comedia de protección de la ciudadanía, no tienen atribuciones, no tienen recursos, no tienen personal. Cuidado con salir de una para caer en otra peor, tenemos que ser responsables, el problema es que la Presidenta quiere Superintendencia, unos la están construyendo como terno a la medida y el PS acordó reforzar el Mineduc y rechazar la superintendencia.
Un ejemplo de las diferencias que tenemos como coalición es la subvención preferencial, en que nos acusan de “discolos” y la Presidenta nos apura para que aprobemos el proyecto. Pregunto ¿como aprobar un proyecto en el cual varios creemos que no es la solución?, mas aun aumenta las desigualdades y mas encima es aportar recursos a un sistema fracasado y colapsado. Porque no esperar las otras leyes que se supone provocara un cambio estructural y sean por lo tanto estas coherentes, la actual responde a un modelo de subvención que todos rechazan. Como opera la lealtad al gobierno, aprobar las leyes sin discutir o siendo fieles al principio de la soberanía popular de quienes nos eligieron para legislar en el parlamento.
La derecha, la iglesia, los empresarios, no darán la pasada a muchos temas que para nosotros son caros en el concepto de Educación publica o estatal, el mecanismo del plebiscito que menciona la resolución del consejo parace incesante, pero en la negociación del 89 renunciamos a ese mecanismo, por lo tanto lo único que queda es la presión social, un gran debate nacional, en que el pueblo fiscalice a todos sus parlamentarios como votan, para así , quizás provocar los cambios no ahora , pero en los próximos cuatro u ocho años mas.
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